CULEBRA DE ESCALERA, una ratonera sin igual.

La Culebra de Escalera “Rhinechis scalaris” es otra de las grandes culebras sorianas, pues su longitud puede alcanzar los 150 cm, aunque culebras con ese tamaño son especialmente escasas. La media normal, suele ser de 1 metro. Esta culebra puede verse desde la primavera hasta el otoño, aunque a veces, dependiendo del calor puede estivar. Son culebras fuertes de color marrón pardo-amarillento, aunque algunos ejemplares son grisáceos. Sobre el dorso y longitudinalmente tienen dos líneas oscuras. Los ejemplares jóvenes son amarillos, a veces también grisáceos con una serie de barras negras con forma de “H”, que todas unidas recuerdan a una escalera y de ahí le viene el nombre a esta hermosa culebra, con la edad van perdiendo las líneas trasversales hasta convertirse en tan solo dos bandas como he descrito anteriormente.

 Ejemplar adulto de Culebra de escalera y joven amarillento con el tipico diseño dorsal en forma de "H".

Ventralmente son amarillentas o blanquecinas, a veces con motas más oscuras en los bordes. No es una culebra muy veloz, pero es muy hábil trepadora. Suele ser agresiva e intenta morder si tiene ocasión, si se la molesta, aunque lo normal es que bufe ruidosamente para asustar, lance avisos o defeque una sustancia olorosa desagradable.

 Manuel Meijide con una Culebra de escalera y detalle de un inofensivo mordisco.

Le gustan los bosques de robles, encinas y pinares de clima seco-mediterráneo con más o menos zonas abiertas y cercanas a los cultivos cerealistas rodeados de muros o zonas rocosas donde apresar por constricción y engullir ratones. Aunque es preferentemente diurna puede verse al atardecer y por la noche, sobre todo en las carreteras de donde absorbe el calor, por eso frecuentemente la observaremos atropellada.

Adulto y joven de "Rhinechis scalaris"

Son culebras ovovivíparas y hacen puestas que pueden llegar a la docena de huevos, en su alimentación predomina la ingesta de distintos roedores y en menor medida pajarillos y reptiles, es por tanto muy beneficiosa en el control de plagas.

Aunque muchas mueren en las carreteras y víctimas de la cachaba o vara del paisano, otras sucumben y proporcionan alimento a las águilas culebreras, otras rapaces y algún mamífero tipo jabalí o zorro. A veces las temibles bastardas también se las comen.

 Primer plano de Rhinechis scalaris.

En la provincia de Soria está presente en diversas zonas y aunque en algunas su declive es evidente o particularmente ha desaparecido, en otras zonas, parece en auge. Normalmente es una culebra escasa y difícil de ver, pero en ciertos lugares o zonas propicias es más abundante. Algunos paisanos sorianos las denominan culebras rayadas, rojas o royas.

 Mapa de la provincia de Soria con la distribución de la 

Culebra de Escalera "Rhinechis scalaris". Manuel Meijide

TOROS CELTIBEROS

Otro de los animales más representados en la cultura celtibérica son los Toros. Si bien, en las zonas más sureñas del territorio celtibero, como Ávila o Zamora, su representación está claramente figurada por los famosos verracos. En la zona de Soria, la Rioja o Teruel, sus representaciones están interpretadas por fíbulas, algún exvoto cerámico o de bronce, tesseras y dibujos monocromáticos o policromáticos en cerámicas.

Son muy conocidos el vaso de los toros y la máscara de toro de las cerámicas policromas numantinas. Se supone que en los rituales o en las danzas celtiberas alrededor de una hoguera los danzantes utilizaban máscaras representando a los dioses, el toro para el pueblo celtibero encarna al dios Lug. También se le relaciona con el símbolo de la tierra, la fuerza generatriz, la fiereza y la vida.

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Evidentemente estos animales junto con las vacas eran la base y el sustento de muchas poblaciones de castros y otros asentamientos, probablemente cuidaban a estos animales en amplias dehesas en compañía de bueyes utilizados para el acarreo y como animales de carga para mover las enormes piedras que se encuentran en los castros a modo de pasarelas o para la construcción de murallas.

Toro de lidia.

Las fiestas de San Juan de Soria capital vienen en parte de un recuerdo de aquellas que pudieron celebrar los celtiberos, hubo un tiempo en el que estas fiestas San Juaneras fueron prohibidas por el carácter pagano que las relacionaba con estos pueblos pasados. Su celebración se lleva a cabo en el Monte Valonsadero, sagrado para los celtiberos y ahora público para el disfrute de los sorianos.

El Jueves “La Saca” tal vez sea el día de las fiestas en el que más relacionados están los Toros con lo que hace tanto tiempo pudo ser una festividad o celebración celtibérica. Doce toros acompañados de jinetes a caballo y gente a pie corren y atraviesan Cañada Honda en dirección a Soria capital, en un pequeño pero agotador viaje de 6-8 km en los que caballos, jinetes y gente disfrutan de la compañía de los astados.

Jueves "la saca". Valonsadero.Soria